A lo largo de la vida recogemos traumas, abusos, luto, negligencia y muchas otras malas experiencias que terminan impidiendo que veamos, recibamos y vivamos claramente el amor de Dios por nosotros, que disfrutemos de la paternidad y la abundancia de vida que Él tiene reservado para nosotros

En respuesta a este escenario de caos, dolor, rechazo y revuelta, la FMC tiene como objetivo capacitar a los estudiantes a través de herramientas de asesoramiento bíblico, principios y modelos que, cuando se aplican a la vida diaria, generan cura, vida, madurez y restauración incluso para el corazón más herido.

Nuestro objetivo es permitir a los estudiantes lidiar con sus conflictos relacionales, sean internos o externos, del pasado, del presente y también los del futuro. Como escuela, creemos que Dios anhela profundamente alinear nuestras vidas con el corazón de su Padre, haciéndonos libres y emancipados del dolor. Capaz de vivir, amar y construir relaciones saludables, así como poder ayudar a otros a recorrer este camino de Restauración.

La escuela se divide en dos fases: teórica y práctica.

Teórico – 12 semanas: Durante este tiempo tenemos clases teóricas y prácticas, grupos pequeños, monitoreo individual, investigación, estudios de casos, libros, entre otras actividades.

Práctico – 12: Durante el tiempo practico se proporcionará experiencias de consejería, escucha activa, preparación y ejecución de seminarios, con el fin de mejorar las habilidades y las enseñanzas adquiridas en la fase teórica.